viernes, 25 de diciembre de 2009

diario y sensaciones de una peregrina (6)

7. SABADO 21: ALVAIÁZERE - ANSIÁO (13,5 km). Sexto día.

¡Dios mío!
Por partes. Hoy etapa corta, unos 13,5 kilómetros. No hay bombeiros voluntairos así que hay que mirar las etapas, planificarlas, por lo que hoy poquito. A la hora de caminar empieza a llover. Me resguardo en un vieja iglesia de un pueblecito perdido. La puerta tiene telarañas, hace días que no deben de oficiar misa allí. Menos mal que una empieza ya a estar curada de espanto, porque realmente asusta. No parece que vaya a espaciar, así que no hay otro remedio, caminar durante 4 horas bajo la lluvia. Estoy loca, suerte si no pillo un resfriado de aúpa. Gracias a Dios a las 13:30 hs ya he llegado a mi destino: Ansiáo. Pero las previsiones no son muy favorales: en el siguiente avituallamiento de mañana (Zambujal, a 22 Km) no hay refugio y el siguiente, Coimbra (a 50 km) está demasiado lejos. No sé que voy a hacer, ya lo pensaré mañana, de momento me voy a almorzar. Y más valdría haberme quedado en los bombeiros. Allí me encuentro con una mesa de ocho hombres donde, entre pitos y flautas, acabamos todos sentados en la misma mesa después de nosecuantos vasos de vino y aguardiente. Total, esta lloviendo a cántaros y no podemos hacer nada. Me rio más hoy que el resto de los días anteriores. Un señor mayor (65 años) se confiesa enamorado de mi desde el momento que me senté a la mesa. "mi sonrisa le cautivó", me dice. Debe de ser el alcohol. Estoy tres horas en ese bar, salgo a dar una vuelta por el pueblo y vuelvo al bar. Todavía queda alguno, que me invita a más vino. Si creen que me van a tumbar, van listos, una tiene aguante. Además la expectativa de volver a dormir en el suelo, sin colchon y esta vez sin cartones, no me atrae mucho, así que me quedo hasta las 20 hs allí. Mañana va a ser un problema, sin autobús hasta Coimbra y sin refugio a medio camino, pero ya veré que haré. Dios proveerá.

P.D. Anoche dormí 11 horas seguidas y tuve mi primer sueño (que no pesadilla). Soñé que salía con Alejandro Sanz, será de tanto cantar "looking for paradise", la banda sonora de este camino. Echo ya en falta mi cama y una buena ducha calentita. De la resaca que empiezo a tener ya ni hablo.

P.D2. Lo impensable. Ni en sueños. Cuando consigo conciliar un poco el sueño en el duro suelo oigo a la banda municipal de musica del pueblo en el salón. "Será una pesadilla", pienso. Ni de coña, ocho tíos entran con su trombón, platillos y demás a practicar para las fiestas. Si me lo cuentan no me lo creo. Nos quedamos todos parados, yo por verlos a ellos que no conseguia hacerme a la idea de que aquello me estaba pasando (¿sería la resaca que me hacía alucinar?) y ellos por verme a mí allí, enbutida en un saco de dormir y con cara de pocos amigos. Salieron pitando, pero practicaron en el rellano. ¡La madre que los parió!.

(sábado, 21 /11/2009)

recogiendo aceitunas


de nuevo el duro suelo



3 comentarios:

amelche dijo...

¿Soñaste que salías con Alejandro Sanz? ¡Ja, ja, ja! Lo que hace el vino...

TORO SALVAJE dijo...

Los enamoras a todos Metis.

Besos.

Striper dijo...

He comido poquito turron