-"Ésto no va bien"- le dijo, mientras las campanas de la iglesia tocaban su réquiem por aquel amor. Los perros aullaban a lo lejos, despavoridos por contemplar como se alejaba aquella pasión por los barrancos de Mont-roig. Hasta el sol, avergonzado y dolorido, se ocultaba a sus vistas y no quería formar parte de esa despedida. Los majestuosos molinos eólicos colgaban sobre sus cabezas como guillotinas afiladas, presagio de las duras horas venideras. "No, no va bien"- dijo ella, y volvió a mirar el tenebroso despeñadero que se cernía a sus pies. "Solo tres pasos..."y por segunda vez aquel fin de semana sintió la cobardía mordiéndola, ávida de miedos.
Con devota adoración recordó a la reina Mora de Siurana, que no dudó en abrir los brazos y volar... Y en como en unos minutos pensó en rendirle culto imitándola. Y piensa si no hay dos sin tres y cuando volverá a presentarse de nuevo esta ansiada oportunidad. Pero la próxima vez pueda que no esté él para detenerla, gritándole que se aleje del precipicio, puede que esa próxima vez sí vuele sola, porque "algo no va bien" y pueda que quizás ésa sea la única solución posible que le ofrezcan sus fantasmas. Es posible que algún dia se le ofrezca por fin morar en la casa de sus sueños.
Con devota adoración recordó a la reina Mora de Siurana, que no dudó en abrir los brazos y volar... Y en como en unos minutos pensó en rendirle culto imitándola. Y piensa si no hay dos sin tres y cuando volverá a presentarse de nuevo esta ansiada oportunidad. Pero la próxima vez pueda que no esté él para detenerla, gritándole que se aleje del precipicio, puede que esa próxima vez sí vuele sola, porque "algo no va bien" y pueda que quizás ésa sea la única solución posible que le ofrezcan sus fantasmas. Es posible que algún dia se le ofrezca por fin morar en la casa de sus sueños.
Mont-roig, 15/03/2009