domingo, 25 de abril de 2010

jueves, 22 de abril de 2010

amigos bloggers

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¿cuándo mi blog dejó de ser mío y tuvo que pasar la censura de la gente que me conoce?
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¿¿Cuándo??

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¿acaso no he repetido hasta la saciedad que éste no es un diario personal y se compone de experiencias, sensaciones, divagaciones y demas elucubraciones de su redactora, o sea, mías?
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¿Por qué siempre la necesidad en creerse lo leido como algo real, tan vívido que puedes sentir hasta empatía por quien lo ha escrito?
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Por mucho que lo repita, sois incapaces de discernir entre el mundo mental de Metis y la vida de Lina. ¿No entendeis que son universos totalmente distintos, uno interior, otro exterior, pero que no conviven juntos? Si fuera así, Lina sería una puta que no para de coger cuchillas para intentar cortarse las venas y Metis, aún cansada de tanto trabajar, saldría a tomar cervezas con sus amigos viendo las puestas de sol de su amada isla.
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¿Por qué intentar siempre buscar los tres pies al gato del escrito y hacer con vuestras suposiciones una Metis que ni vive ni siente nada parecido en la mayoría de los casos, tan solo escribe lo que su mente divaga sin ton ni son producto de los fantasmas que habitan en su mente? ¿Tan dificil le resulta a algunos?
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Quien no entienda eso le suplicaría que surfeara por otros blogs mas amenos al mio que empiecen con un "querido Diario, hoy..." porque es la unica forma que tendran que no errar en sus suposiciones sobre esa persona.
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lunes, 19 de abril de 2010

divagando...:amigos


a veces me canso de. De amarte, de cuidarte, de preguntarte, de susurrarte, de abrazarte y hasta de sonreirte. Sí, lo hago, cuando lo unico que recibo son mijagas de tu atención. Pero claro, solo somos "amigos con derecho a roce". Y nunca me ha gustado esa definición. De hecho la odio. Nadie tiene más derecho a rozarme que el que yo le dé. Y ni tan solo será un derecho, sino un privilegio. Tan solo follamos de vez en cuando.

Y punto.

Cualquier intento de acercamiento o muestra de afecto será penalizado con un "
no es ésto lo que quiero, mejor lo dejamos, Adiós". Por tanto lo seguiré haciéndo en silencio, hasta que me atragante con mi propias palabras, éstas se oxiden en mi boca y entonces solo escupa el suficiente veneno para alejarte de mi vida y poder entonces gritar en paz. Y volar, porque ya me siento con las alas cortadas cada día.

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jueves, 15 de abril de 2010

trabajo

No tengo tiempo para nada...

Estoy muuuy cansada...

Siento dolores en mi cuerpo ( los del alma son perennes)...

Y encima no te voy a ver y me sentiré sola en mis pocos ratos libres
(¿quién me abrazará ahora cuando el agobio de la rutina me supere?)...


Bienvenido al puto verano de nuevo.

miércoles, 7 de abril de 2010

divagando...: rutina



Vuelve implacable la rutina ve
raniega con su incesante martilleo en mi cabeza recordándome que soy hamster en mi jaula.

De nuevo las cinco tazas de café al día para inyectarme una alta dosis de motivación. Que alguien me dé un motivo para levantarme cada día y aguantar esta rutina que me abrasa el alma con su cotidianidad repetitiva. La vida en estos meses debe de ser algo más que trabajo-comida-trabajo-cama. Pero ¿Cómo y dónde buscar alicientes para seguir respirando si no dispongo de tiempo?


Ando como un zombi al que le han robado la mortaja y deambula tiritando de frio buscando algun trapo con el que arroparse.


Tengo ganas de vomitar.

domingo, 4 de abril de 2010

divagando...: hospital



Me es indiferente estar aquí, en la sala de espera de urgencias de un hospital con el suero infiltrándose en mis venas, que en una discoteca concurrida de adolescentes comiéndose a besos mientras sostengo solitaria un vaso de whisky entre las manos. Simplemente no estoy en ninguno de los dos sitios. Me siento ajena a la realidad que me rodea.

Tan solo estas gotas constantes me mantienen aferrada a una vida que no deseo. No quiero compartir más momentos con nadie ni con nada, ¿tánto es pedir? ¿desde cuándo no somos libres para escoger nuestro propio destino? Pero sé mi respuesta... desde que la cobardía se instaló en mi voluntad y paraliza cualquier acción que pusiera fin a este cautiverio al que me entrego sumisa día tras día.

Quien pudiera cerrar los ojos y soñar.