viernes, 28 de mayo de 2010

ven

.
.
Quisiera que viniera ya a buscarme, que dejara de hacerse rogar, ¿no entiende que quiero morir? Nada me ata a esta vida pasada y a la futura no le hallo justificación para ir a su encuentro.
 ¿Porque alargar esta agonía que me consume el alma a base de lagrimas y vacios en mi ser? ¿Por qué no poder decidir uno mismo sobre su persona? ¿Acaso no somos seres únicos? pues como tales, deberíamos escoger cuando queremos seguir caminando o cuando ya estamos cansados de ir pisando cristales que rajan el alma.

No quiero seguir, veo mujeres ya entradas de edad y me horroriza pensar que algún día seré como ellas, vagando con la mirada perdida, arrastrando el peso de unos años que me han escogido a mi y de los cuales yo nunca compré la loteria. Ni tan siquiera quiero llegar a mañana, ¿como soportar todos lo años que todavía me quedan por vegetar, arañando dentro de mí en busca de una ilusión que se solidificó hace ya años?

La maldita cobardía siempre...
.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

La maldita cobardía y la maldita incertidumbre de que algún día cambiará, cambiarás o cambiarán. Que más da, algo cambiará. Pero no sucede.

francesc dijo...

bffff... miedo me das :)leyendo te en tu post me da la sensación que me ha pasado ya mi tiempo :):):)
Una abraçada